Más de un centenar de personas realizaron el domingo un “acto de repudio” frente a la casa del disidente Vladimiro Roca, en La Habana, donde una decena de opositores al gobierno cubano mantienen un “plantón” de protesta, constató un periodista de la AFP.
Consignas como “Comandante en Jefe Ordene”, cantos revolucionarios y alusiones a los disidentes eran amplificadas por un megáfono, entre banderas y carteles de apoyo a la revolución de Fidel Castro.
Según dijo telefónicamente a la AFP la dirigente opositora Martha Beatriz Roque, el grupo lleva 24 días en protesta por la confiscación policial de una cámara fotográfica y el sábado “entraron, nos dieron golpes, hay una persona con la cabeza partida y yo tengo un dedo fracturado”.
“Eso no es cierto, no ha habido esa agresión, nuestra política es sin ninguna violencia”, dijo a la AFP Ávila Góngora, de 73 años, trabajador del Turismo, uno de los manifestantes que desde el sábado realizan el acto de repudio.
Desde el tejado de la vivienda de Roca pende una tela blanca con la inscripción “Casa de la Libertad”, mientras que en el portal hay colgada una corona fúnebre. “Habían puesto carteles contrarrevolucionarios (en la cerca metálica perimetral) y nosotros se los quitamos, queda ese porque está adentro y nadie ha entrado. Además le pusimos esa corona”, añadió Ávila. “La corona significa el entierro del imperialismo”, dijo Daniel Cazalla, 54 años, concejal de la circunscripción electoral donde vive Roca, en el barrio Nuevo Vedado, en el centro de La Habana.
Elso Oria, un jubilado de 66 años confirmó: “Ayer hicimos otro acto de repudio contra la política de estos elementos” que llegó hasta 300 personas, y se quejó de que los disidentes hayan esperado a los escolares a la salida de sus centros educacionales, para decirles “cosas contrarrevolucionarias”.